D. Sebastián Zaragoza Soto

Almirante Jefe de la Armada (AJEMA)
(Abril de 2004 – Julio 2008)

Retrato al Óleo

81  x 65  cm.

Cuartel General de la Armada

Sala de Retratos al Óleo de Almirantes

Proyecto del Retrato:

El Retrato al Óleo del AJEMA D. Sebastián Zaragoza Soto, pintado al Óleo sobre lienzo en medidas 81 x 65 cm., está expuesto permanentemente en la Sala de Retratos al Óleo de Almirantes del Cuartel General de la Armada.

Dispongo de información fotográfica que la Armada me proporciona para la realización de este Retrato. Además de contar con el posado del modelo para tal fin, lo que me proporciona una información añadida muy importante.

Empiezo el proyecto y esbozos complementarios para la realización del mismo, empleando además los recursos usados normalmente por mí en la realización de retratos.

Uniforme y elementos complementarios:

A la hora de aceptar el encargo, me motiva el hecho de que había que pintarle vestido con el Uniforme de Gala junto con sus condecoraciones, galones, y algún detalle más.

El resultado podía ser muy agradable de ver, y no todos los días uno puede tener la oportunidad de pintar a un Almirante de la Armada española, y menos con el Uniforme para su Retrato Oficial.

Así pues, honrado me sentí y me siento por el honor que se me ha hecho.

Por tanto, en este Retrato al Óleo del AJEMA había que tener muy presente, además del parecido del modelo, (que se logró con demasía y aprobación del mismo), los diferentes elementos complementarios al Uniforme Oficial de Gala del Almirantazgo de la Marina española.

La buena realización del Retrato en general, pero del Uniforme en particular, complementando perfectamente al modelo, fue algo a tener especialmente en cuenta en todo momento.

Realización del dibujo y primeros colores:

El procedimiento para hacer el Retrato fue el de siempre: El estarcido picado por puntos de pequeño diámetro.

Los colores en primeras capas los doy más bien opacos para seguir con veladuras en las carnes y pinceladas sueltas, como en esos momentos me pedía el cuerpo, intentando que éstas estuvieran a la altura del modelo.

Así pues, una vez conseguidas las carnes, me puse con el Uniforme, las condecoraciones y elementos representativos del cargo o galones, estrellas y botones.

Hay que tener en cuenta que hay que encontrar el equilibrio en el color, brillo y luces de estos complementos para no restar protagonismo a la cabeza y manos del modelo, que son lo realmente importante a destacar en el conjunto de la Obra.

Como vemos, además de pintar hay que tener siempre un poco de psicología aplicada para que, por el bien del trabajo, todo salga según las pretensiones previstas.

 

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